¿Cómo preparar una deliciosa taza de café en casa? Mucho más que apretar un botón
Hoy en día, hacerse un café se asocia al sencillo gesto de apretar el botón de una máquina. Sin embargo, detrás del proceso de preparación de una taza de café se esconde un verdadero arte, que todo amante del café necesita conocer.
Históricamente, el café ha pasado por diferentes métodos de extracción o métodos de filtrado, que actualmente siguen empleándose. Y es que, dependiendo del tipo de cafetera que se utilice, con un mismo producto se pueden obtener preparaciones con cuerpos y matices muy diferentes.
Por ejemplo, si tomamos como base el Café 100% Arábica de Cafés Pont, un café con una molienda media y adecuado para su uso en cafeteras domésticas, y lo preparamos en una cafetera italiana (o moka) obtendremos un café con una intensidad y cuerpo intermedios.
Mientras que, si el mismo café se prepara en una cafetera de filtro o goteo, mediante el proceso conocido como percolación, dará lugar a una café más largo y suave, con una gran sutileza de matices y parecido a una infusión, pero con una mayor concentración de cafeína que si se prepara en una cafetera espresso.
Con una cafetera francesa, en cambio, conseguiremos una taza con mucho cuerpo y más denso que con otras cafeteras, debido a que retiene más aceites. También contará con una textura un poco más arenosa, a causa de las pequeñas partículas de café que traspasan el filtro.
Para cafeteras superautomáticas, que muelen el café en el mismo instante de su preparación, la recomendación es utilizar un café en grano con un tueste lento especial para obtener el mejor resultado, como la gama de cafés Collection de Cafés Pont. Con esta cafetera obtendremos un café cremoso, intenso y con más cuerpo.
De manera que, para disfrutar de una deliciosa taza de café no sólo es importante escoger un buen producto por su variedad, origen o proceso de tueste, sino también la elección del tipo de cafetera, que dará lugar a resultados distintos en función de nuestras preferencias.